… porque hoy es 1 de Mayo, DÍA INTERNACIONAL DEL TRABAJO.
"Del trabajo" y no del trabajador, como estoy
leyendo repetidamente por las redes sociales. Y aunque parezca una diferencia
sencilla, incluso banal, es más importante de lo que a priori parecería.
Explicaré qué se celebra hoy:
Esta celebración tiene su origen en la huelga que, tal día
como hoy en 1889, hicieron los trabajadores de Chicago como reivindicación del
establecimiento de una jornada de 8 horas. Trabajadores a los que
posteriormente ajusticiaron. Por ello, a modo de recuerdo por la lucha que
estas personas llevaron a cabo, y como reivindicación de los derechos laborales
y sociales de todos y todas, se celebra el 1 de Mayo "El día internacional
del trabajo".
Actualmente, nuestra Constitución española de 1978 recoge en
su artículo 35 la obligación y el derecho a trabajar, a elegir libremente la profesión,
y a recibir un salario. Además dice expresamente: "sin que en ningún caso
pueda hacerse discriminación por razón de sexo".
Por eso creo importante la diferencia que más arriba
señalaba. No cabe, en ningún supuesto, ninguna discriminación por razón de
sexo, y no sólo en cuanto a lo que se refiere al derecho al trabajo, sino en
ningún ámbito, puesto que el artículo 14 de nuestra Carta Magna proclama la
igualdad de todos y todas y la no discriminación por razón de sexo (entre otras).
Señalar que es el día del trabajador, a secas, es una forma
de invisibilizar el trabajo de las mujeres. Y además parece que es un día
dedicado a la persona que tiene una ocupación efectiva, la que presta sus
servicios a cambio de un (supuesto) salario. Pero si cambiamos esta expresión por
"Día internacional del trabajo", no solo estamos incluyendo a la otra
mitad de la población, sino que incluimos a todas las personas que tienen
derecho a un trabajo. Y hoy en día, en la situación por la que está pasando
España, esto no es cuestión baladí.
Sin nada más que reivindicar, que paséis un feliz día del
trabajo.